ARGENTINA: PALABRAS SOBRE LAS ELECCIONES PASO, 2021
ENCUADRE CONCEPTUAL GENERAL DEL DOCUMENTO
Hay que ser claro en esto en Argentina gobierna la burguesía. Y salvo en los años 60 y 70 por la acción de las organizaciones revolucionarias con fuerte inserción en las concentraciones fabriles, estudiantiles y marginadas y una estrategia de toma del poder claramente definida y en la crisis del 2001 con un protagonismo de los movimientos sociales pero carente de dirección política salvo durante esos periodos el poder burgués nunca se puso en cuestión.
Dicho esto, es necesario recalcar que la «Democracia representativa burguesa» se legitima por medio de las elecciones. Es decir, las elecciones constituyen el espíritu y esencia del barniz «democrático del sistema de explotación». Pero el parlamento y quien maneja los hilos es la burguesía y quienes consciente o inconscientemente se prestan a este juego electoral se prestan a esta pelea de facciones de la burguesía por el control de la administración del Estado. Este hecho fue palpable en el proceso electoral pasado que concluyo con la derrota estrepitosa del oficialismo en las Primarias Abiertas Simultaneas Obligatorias (PASO).
Se me dirá que esta definición es obvia y elemental. Que cualquier marxista la conoce. Pero a la luz de los hechos de Perú donde el llamado gobierno popular esta siendo cercado por la derecha fujimorista. De Brasil donde el fascista de Bolsonaro pretende dar un golpe de Estado. De las limitaciones del proceso Constituyente en Chile y en el propio resultado de las PASO en Argentina y las diferentes visiones sobre este fenómeno esta aseveración y aclaración se hace fundamental para poner un punto de partida a este análisis.
Lo he dicho en otras publicaciones en la Argentina con la llegada del Macrismo al poder se construyo la pata electoral más clara del PARTIDO MILITAR. La organización política transversal a todos los partidos burgueses de la oligarquía local. Por eso no es extraño que en CAMBIEMOS confluyan peronistas, radicales, sectores religiosos, neonazis, libertitarios etc. Porque los une la defensa de los intereses de su segmento de clase. Del segmento más reaccionario y asesino de nuestra historia como país. Pero la cristalización de dicha orgánica no es sino el mascaron de proa de un peligro aun mayor el surgimiento de un fascismo, del huevo de la serpiente expresada en elementos como Milei. No se trata de un fenómeno aislado. No se trata de otro Blumberg. Se trata de una política internacional articulada desde el propio imperialismo y sostenida a escala global por sus medios. El fascismo es la forma distintiva utilizada por el imperialismo en el mundo. No importa si es Ucrania o Perú o Brasil o España, es la construcción política que necesita el Capital para realizar una concentración de la riqueza aun mayor. Para ello necesita la eliminación creciente de las garantías y libertades colectivas. Incluso ya les resulta hasta obsoleto las instituciones que mantenían cierta fachada “democrática en los Estados burgueses modernos” vamos hacia una concepción de Estado aun mas restrictivo, autoritario sometido enteramente a los designios del imperialismo.
Este segmento de clase es el que maneja el PODER REAL HISTORICAMENTE EN NUESTRO PATRIA. Poder que no hay que confundir con «el gobierno» es decir con la «administración transitoria del Estado». Su PODER radica en el monopolio del comercio exterior e interior. En el control de las divisas. En el control de los medios de comunicación. En el control del aparato mafioso judicial. En el manejo efectivo de las fuerzas represivas y en el control de las cajas negras delincuenciales que gestionan dichas fuerzas.
Entonces cuando uno analiza esa estructura de poder entiende por un lado la enorme capacidad desestabilizante de esa facción de clase. Y por otro la imposibilidad real de que exista siquiera un gobierno de margen «reformista» «populista» » Progresista» sin enfrentarse decididamente contra estos sectores concentrados. No existen terceras vías, ni medias tintas, ni posibilidad de dialogo con quienes usan esos monopolios para destruir la calidad de vida de nuestro pueblo.
Como lo he definido en otras publicaciones el Gobierno de Alberto Fernández fue producto de una anomalía histórica donde el candidato del mercado que recibió todo el apoyo del FMI, sus medios de comunicación y dispuso de todos los recursos económicos fue vencido de manera aplastante por medio de la bronca de las masas que no encontraron otro canal de expresión que las elecciones. Luego de la sorpresa inicial el imperialismo reformatea su táctica y pasa furiosamente a encorsetar nuevamente el movimiento naciente para condicionarlo, domesticarlo o derrocarlo según lo crea conveniente y necesario. Lejos de esta decisión coyuntural de las masas la votación no fue un cheque en blanco. Fue la expresión de depositar su anhelo de mejorar sus condiciones de vida en otro candidato. Y la renovación de ese contrato electoral estaba sujeto al cumplimiento de ese objetivo.
Leonardo Herrmann
Dirigente de la Federación Internacional de Escritores por la Libertad – FIEL