AHORA EL PARTIDO «COMUNISTA» DEFIENDE LA CONSTITUCIÓN DE PINOCHET
“Se ha visto al Diablo vendiendo cruces”. Así dice el dicho popular. Y que sabiduría.
Bueno esto es lo que ocurre con el Partido “Comunista” que ahora no sólo vende cruces sino que también defiende la Constitución de Pinochet contra la cual el pueblo general se alzó durante el 2019 donde una de las consignas era precisamente despinochetizar Chile, barrer con el neoliberalismo y todos sus pilares que se encuentran anclados también en la constitución maldita.
En el 2005, el socialdemócrata Ricardo Lagos realizó una reforma de constitución donde él decía que ahora quedaba una constitución democrática y de todos. Sin embargo, para el Partido “Comunista” y para el resto de la izquierda extraparlamentaria esa constitución continuó siendo la de Pinochet. La evolución del P”C” ha ido cada vez a posiciones reaccionarias o simplemente de derecha liberaloide más allá que el P”C” pertenezca a EIPCO (Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros).
Desde el inicio de la transición hacia la consolidación al neoliberalismo, 1990, y una vez producido el derrumbe del Campo Socialista de Primera Generación, el P”C” fue peleando una alianza con la alianza neoliberal del momento a saber la Concertación, la misma que presentada como progresista pactó un retorno a la democracia burguesa con la dictadura donde el centro del acuerdo era precisamente dejar intactos los 11 Pilares del Neoliberalismo construidos durante los 17 años de genocidio y terrorismo de estado.
Primero fueron los pactos por omisión con la Concertación en cada una de las elecciones, Después fue un pacto electoral y/o político que llevó a la creación de la Nueva Mayoría que permitió a Bachelet acceder al gobierno. Fue ahí donde el P”C” logra elegir sus primeros diputados con los votos de los progresistas-neoliberales. El P”C” había vuelto a su zona de confort. Ya en el segundo gobierno del PC este tenía ministros y había aumentado su elenco parlamentario.
En cada uno de esas transacciones, el P”C” se movió cada vez más hacia la derecha, asumió cada vez más como propio el programa de los progresistas-neoliberales o de la socialdemocracia y cada vez más fue evidente el abandono del P”C” del campo popular y de los trabajadores. Su rol fue cada vez más reaccionario.
Quedó clarisimo ese rol reaccionario del P”C” durante las masivas manifestaciones estudiantiles contra el gobierno de Piñera donde la consigna del fin al lucro en educación se fue agregando otras de tanta importancia estructural como esa como por ejemplo, el Fin de las AFP, el Fin del Código del Trabajo, la Nacionalización del Cobre y del Agua, el Fin de la Constitución del 80 y el Fin de Neoliberalismo. Toda esa protesta masiva donde se avanzaba a una huelga general o paro productivo, donde cada vez eran más masivas y transversales las manifestaciones, el P”C” llamo al orden a sus huestes, tiro el poto a las moras y situó la lucha al interior del parlamento burgués desactivando la protesta del pueblo o ciudadana. Piñera se salvó de caer en su primer gobierno.
Misma táctica mostró el P”C” durante la revuelta popular o estallido social durante el 2019 con la gran diferencia que en esta oportunidad el terrorismo de estado, los crímenes contra la humanidad y el genocidio se hicieron presentes en gloria y majestad. La protesta era nacional, pero con una cuota creciente de violencia popular en respuesta al terrorismo de estado. Se multiplicaron las asambleas populares territoriales y el conjunto del reformismo ahora progresistas-neoliberales (P”C” + Frente Amplio) al igual que sucediera durante la Unidad Popular con los Cordones Industriales se volcaron a torpedear esas asambleas populares, derribarlas y deslegitimarlas porque claro ellos siempre le han tenido terror al poder popular y nuevamente se encargaron de dejarlo claro.
Si bien el P”C” no firmó el Acuerdo por la Paz y una Nueva Constitución de noviembre del 2019, no tuvo problema alguno de ser parte importante de esa fiesta y ser partícipe de cada una de las etapas de su implementación. Todo con la finalidad de encauzar nuevamente la indignación popular hacia dentro del parlamento y Estado burgués para que estos recuperaran su legitimidad y evitar su derrumbe.
Ahora, el P”C” da un paso más quedando al borde del abismo en su transitar reaccionario.
El 17 de diciembre Chile tendrá un segundo plebiscito para aprobar o rechazar una nueva constitución. Si un segundo intento dentro de la salida burguesa a la crisis del capitalismo.
El primer intento fue la redacción de una constitución progresista-neoliberal redactada por la Convención Constitucional donde la Ley 21.200 que regulaba esa convención prohibía la revisión del modelo económico como del conjunto de los tratados internacionales firmados por Chile, y de todo tipo. Es decir, las bases y pilares del neoliberalismo quedaban intactos y los acuerdos mineros que permiten el saqueo de la minería del cobre, litio, y su privatización eran resguardados. El P”C” aceptó esas reglas, no las cuestionó y fue parte de esa parodia de constituyente entregando un engendro de constitución que en nada beneficiaba a la clase trabajadora. Dicho texto fue rechazado mayoritariamente.
Este segundo intento de la burguesía y de la clase política civil ha sido redactada con una mayoría de convencionales fascistas. Es aquí que ante el plebiscito se presentan dos alternativas. Los “A favor” de mayoría fascista junto a sectores progresistas-neoliberales provenientes de la Concertación y los “En Contra” de mayoría Progresistas-Neoliberales (P”C” + Frente Amplio + Ex Concertación) que llaman a rechazar.
Lo curioso o reaccionario del caso es que el P”C” ha levantado un discurso en que “se debe rechazar la propuesta constitucional que se plebiscitará porque es malísima y la actual constitución, la del 80 y de Pinochet, es mucho mejor que la propuesta”. En otras palabras, el P”C” se han convertido en defensor de la constitución de Pinochet, reformada por Ricardo Lagos el 2005, que desde entonces es la constitución Pinochet-Lagos, y que ha sido fuente de todos los males que ha padecido la clase trabajadora durante 30 años y contra la cual el pueblo y la clase en general se sublevaron durante el estallido social del 2019. Buena esa constitución, esa misma, el P”C” la defiende con garras y dientes. Ya hablan de “NUESTRA CONSTITUCIÓN” en referencia a la constitución del 80 y tratan de engañar en la campaña al pueblo diciendo que “hace tiempo no es la constitución de Pinochet, del 80, sino es la de Lagos porque nosotros la reformamos”, lo cual es completamente falso. Pero ¿no era que ellos mismos decían que la constitución del 80 era la de Pinochet, era neoliberal? ¿No dijeron eso durante las protestas masivas del 2011 y durante el 2019? Y ahora dicen lo contrario. Verdad que tirar el poto a las moras es el deporte predilecto del P”C”. Las volteretas no es algo único de Boric. Quizás se lo aprendió al P”C”.
Pero que más se puede pedir. Si durante el P”C” creaba su brazo armado, el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, FPMR, mientras internaba 90 toneladas de armas para desarrollar la lucha armada contra la dictadura y enviaba a sus militantes a ser entrenados en la ciencia militar a países socialistas, al mismo tiempo negociaba con la oposición burguesa a la dictadura con la intención de provocar una salida política-pactada y evitar que la vía insurreccional y armada fuera la salida. Ese oportunismo llevó a la separación del FPMR del P”C” y a la declaración de la Guerra Patriótica Nacional, GPN, por parte del FPMR, el 21 de octubre de 1987. El oportunismo y sus políticas de derechas no son nuevas.
Con todo ello las preguntas centrales que se desprende son: ¿es posible que este P»C» sea considerado una «vanguardia proletaria», una «vanguardia revolucionaria» como la definieron Marx, Engels y Lenin? ¿Es creíble que sea este P»C» el que vaya a organizar y hacer la revolución socialista, avanzar hacia la toma del poder, terminar con el capitalismo y combatir al imperialismo como señalan los manuales marxistas-leninistas que constituye la ideología que este P»C» dice abrazar?
Claramente ¡NO!
Si bien el P»C» nominalmente adhiere al marxismo-leninismo no basta con la sola adhesión ya que la práctica del P»C» es reaccionaria y socialdemócrata. El P»C» hace muchas décadas que dejó de practicar desde el marxismo-leninismo sino que ha abrazado el revisionismo desde Krushev pasando el Browderismo, el Eurocomunismo por Gorbachev y su Perestroika hasta hoy donde se define como un partido progresista el cual defiende el conjunto del sistema capitalista-burgués donde se refugia en el etapistmo, el parlamentarismo y el reformismo esencial.
De ahí la conclusión debe ser lógica. Se requiere avanzar en la construcción de un polo o instrumento comunista revolucionario que se plantee la revolución socialista y comunista, que se decida combatir el capitalismo y su Estado, avanzar en su destrucción como también combatir el imperialismo. Al igual que ayer y siempre, los explotados del campo y la ciudad se deben autoconvocar en esa tarea histórica y estratégica y también combatir a los progresistas cuya misión es confundir al pueblo y a la clase desde su interior y así evitar la revolución.
Para seguir leyendo
Los 11 Pilares del Neoliberalismo en Chile (2013)
Entrevista a Lautaro Carmona, presidente del Partido «Comunista» de Chile
https://www.nuevopoder.cl/carmona-pc-a-la-fecha-la-constitucion-del-80-no-es-la-del-80/