
DE LA GREMIAL DE ABOGADOS. EL HERMANO FACUNDO JONES HUALA SERÁ EXTRADITADO A CHILE
Comentario Previo
La clase represora, sus fuerzas, aquella que defiende los intereses oligárquicos-capitalistas no se diferencian en nada si esa fuerza política se autodefine como izquierda-progresista o como de derecha-fascista. Cuando se trata de defender los intereses oligárquicos ambos son lo mismo.
Esto ocurre con la persecución y represión binacional llevada por las oligarquías de Argentina y Chile contra el Pueblo-Nación Mapuche. Ambos Estados se han coordinado para mantener en la opresión y en la usurpación territorial a ese pueblo ancestral. De nada sirve la poesía y las alabanzas que aparecen en los libros de historia y textos escolares a ambos lados de la Cordillera de los Andes. Todo indica que esa valentía, ese heroísmo y justeza de las luchas redactadas en dichos textos fuese reservado para algo del pasado. Claro a la oligarquía actual no le conviene que el Pueblo-Nación Mapuche recupere lo que le han arrebatado. Si ayer los llamaban héroes hoy son terroristas.
Resulta también paradójico que este traslado o extradición del hermano Facundo Jones Huala se realiza bajo el gobierno de Javier Milei (fascista) y de Gabriel Boric (progresista) ambos unidos por el mismo objetivo.
Resulta aun más paradójico que la sentencia de la extradición la realice el mismo poder judicial que siglos atrás legalizó la usurpación, la invasión militar y la anexión territorial del Wallmapu. El verdugo convertido en juez.
Algún le habrá cabido al embajador de Chile en Argentina, el socialista renovado o socialista neoliberal que es lo mismo, José Antonio Viera-Gallo. Fue Viera-Gallo quien no hace poco declarara que él haría todo lo posible por extraditar a Chile, desde Argentina, al ex Comandante Salvador, Sergio Galvarino Apablaza, del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, FPMR, quien figura como refugiado político. Si Viera-Gallo tiene la intención cierta de romper con el refugio político, por lo tanto, con el derecho internacional, de igual forma su mano en el proceso contra el hermano Facundo se siente.
Pero, la última paradoja de esta coordinación binacional represiva, Chile-Argentina, es que fue durante las décadas pasadas cuando los Estados y dictaduras militares del América Latina se coordinaron también para desarrollar la más brutal represión y crímenes contra la humanidad jamás conocida en la historia moderna del continente. La desaparición forzada de personas, el traslado de un país a otro para hacerlos desaparecer, la tortura, la ejecución sumaria y los consejos de guerra sin duda fueron todos antecedentes que los actuales gobiernos de Chile y Argentina han utilizado para reprimir al Pueblo-Nación Mapuche. Sin duda, los manuales de la Doctrina de Seguridad Nacional elaborado en los Estados Unidos se los conocen al revés y al derecho y desde la lógica contrainsurgente el gobierno de Milei y todos los gobiernos a Boric, y con Boric incluido, ahora lo aplican bajo la excusa de defender la soberanía y seguridad nacional.
A continuación publicamos un comunicado, íntegramente, de la Gremial de Abogados quien ha defendido al hermano Facundo Jones Huala. Llamamos a todas las organizaciones a desplegar la más amplia solidaridad activa. ¡Libertad a todos los presos políticos mapuche!
INFORMAMOS QUE FINALMENTE
FACUNDO JONES HUALA, LONKO DE CUSHAMEN, SERÁ TRASLADADO A CHILE
La Gremial ya no tiene más nada que hacer.
Hemos luchado en el juicio como todos pudieron presenciar. Un juicio en el que a la defensa no se le permitió utilizar ni una prueba y en el que, una vez más, quedó claro que para el Poder Judicial las extradiciones son un mero trámite y que hace valer las razones de estado (y la voluntad y los intereses de los poderes que los manejan) por sobre toda fachada de garantías judiciales o derechos de los perseguidos.
Hemos agotado el camino judicial apelando a la Corte Suprema que, previsiblemente, validó el juicio trucho de la primera instancia. Informamos sobre cada paso judicial y administrativo a Facundo, a su comunidad, y públicamente a la militancia y organizaciones populares. Hemos difundido y denunciado por todos los canales de comunicación a nuestro alcance las arbitrariedades y la voluntad política de persecución escondida tras ellas.
Hemos tocado todas las puertas posibles de ministerios y altos funcionarios del gobierno saliente, no para impedir la extradición, que estaba claro que iba a ser concedida por Alberto Fernández y Santiago Cafiero, sino para intentar, al menos, que Facundo terminara de cumplir en Argentina los escasos meses que le quedan de pena.
Con ostentosa ausencia de voluntad política, ninguno (ministros, secretarios de Estado y funcionarios del gobierno anterior) realizó el menor esfuerzo para que esa posibilidad se concretara.
Reconocemos que, en algunos casos, nos abrieron las puertas y nos atendieron bien. Pero se negaron a mover un dedo por Facundo. En otros casos, se sacaron la careta.
Son los mismos exfuncionarios que se negaron a ratificar los acuerdos firmados a favor de la comunidad Lafken Winkul Mapu; los que incumplieron su compromiso y demostraron que no tienen palabra y que el famoso acuerdo fue una mentira “para la foto”.
Hemos intentado, sin resultado alguno, llegar hasta los funcionarios del gobierno chileno para que se autorizara esa permanencia, cosa que no representaba ningún problema legal ya que existe un Tratado que lo permite.
Quienes sí se comportaron diligentemente fueron los funcionarios de la Defensoría Pública de Chile con quienes la Gremial se puso en contacto y quienes realizaron, dentro de sus funciones, gestiones ante las autoridades chilenas para, al menos, conseguir información que los propios funcionarios argentinos no podían o no querían conseguir.
Fueron ellos quienes, finalmente, nos enviaron copia de la Resolución por la cual el Ministerio de Justicia chileno rechazó autorizar que Facundo terminara su condena cerca de su comunidad y de sus familia.
Después del juicio de Extradición y hasta que esta resolución del gobierno chileno cerró totalmente toda posibilidad, la Gremial (salvo poquitas excepciones) quedó absolutamente sola en gestionar y alegar a favor de Facundo, a favor de que, al menos por razones humanitarias y por su condición de lonko del pueblo originario mapuche, se le permitiera quedarse en Argentina.
Es una lástima porque, tal como parecen venir las cosas, todos vamos a necesitar de todos.
Incluso hasta nosotros mismos podremos ser objeto de represalias por parte del Gobierno y no deja de preocuparnos que el caso de Facundo Jones Huala vino a demostrar que, al menos para muchos, la “solidaridad” tiene patas cortas.
La Gremial seguirá como hasta ahora, sin pedir análisis de sangre a compañeros presos y sus organizaciones, sin bajar los brazos.
Sin que nos aparten de esa convicción ni sus identidades políticas ni, mucho menos, sus medios o métodos de lucha.
En la medida de nuestros muy escasos recursos y posibilidades.
Mantuvimos estos días las últimas charlas con Facundo y lo vimos firme en sus convicciones y recomponiéndose para enfrentar estos últimos meses de prisión y, sobre todo, el regreso al territorio. Si nos es posible, trataremos de visitarlo en Chile.
El resto es seguir adelante con las causas que nos encomienden. (Hasta aquí el comunicado)