CHILE. EN MEDIO DE CORRUPCIÓN, EL FRENTE AMPLIO SE TRANSFORMA EN PARTIDO
Con una buena noticia, el progresismo, Frente Amplio, ha dado a conocer la fusión de dos de sus partidos, Convergencia Social (CS) y Revolución Democrática (RD), para crear un nuevo partido o emprendimiento empresarial / mini pyme. Esto también a la espera de que se les una a esa fusión el tercer y cuarto movimiento integrante de la alianza Frente Amplio, Comunes y Plataforma Socialista. El nuevo emprendimiento continuará con el nombre de Frente Amplio. La prensa oficialista ha dado a conocer con la fusión de CS y RD convertiría a la nueva orgánica en el partido más grande con alrededor de 60.000 militantes por sobre el Partido Comunista con 41.000 registrados, ambos en el Servicio Electoral.
La cifra de la militancia no cuadra.
Se sabe que en el caso de RD cada vez que ha realizado elecciones internas para elegir su directiva sólo han votado 2000 militantes aproximadamente de un universo militante de más de 20.000. Es decir, dichas elecciones no alcanzan cumplir con los estándares mínimos de participación democrática, de quórum democrático para legitimar dichas elecciones. Esto cobra mayor dramatismo ya que esas elecciones de directiva se realizaron siempre por internet y desde la comodidad de los hogares de los militantes. Esto mismo ocurre en el caso de CS.
Lo anterior quedó reflejado también en el plebiscito realizado este 9 de marzo para ratificar el proceso de fusión de ambos partidos. En el caso de Revolución Democrática 1780 militantes votaron en total, donde 1464 (82%) votaron a favor y 298 (17%) votaron en contra. En el caso de Convergencia Social votaron un total de 8410 militantes donde 6818 (81%) votaron a favor y 1572 en contra (19%). A primera vista estas cifras cumples con los standares democrático en cuanto a aquello de «mayoría manda». Lo que no dice la información periodística oficial es en el caso de Revolución Democrática este tiene 31.284 militantes, aproximadamente, inscritos ante el Servicio Electoral y en este plebiscito votaron un total de 1780 militantes. En el caso de Convergencia Social, el partido de Gabriel Boric, tiene un total de militantes de 36.576, aproximadamente. En el plebiscito de fusión votaron un total de 8410 militantes. En ambos casos, ambos partidos ni siquiera alcanzaron el 50% de la participación militante para validar la fusión democráticamente y para demostrar que efectivamente la militancia que ellos mismos registran sea una militancia real, efectiva.
Lo anterior deja al descubierto que los partidos neosocialdemócratas, la nueva generación de partidos progresistas no son más que partidos de papel, partidos vacíos de militancia y dedicado al clientelismo político-electoral donde quienes se registran lo hacen por la obtención de algún beneficio como pudiera ser empleo en alguna repartición del Estado o simplemente la inscripción o afiliación a esos partidos fueron obtenidas en su mayoría en forma fraudulenta. Aun así con está escuálida participación electoral interna estos partidos se erigen como organismos representativos del pueblo, gobiernan y obteniendo cuantiosos recursos por parte del Estado en lo que se conoce como financiamiento estatal a los partidos donde este se calcula por la cantidad de votos obtenidos en cada elección nacional teniendo cada uno de estos un precio que multiplicado por la cantidad de votos arroja millones de pesos a las arcas de los partidos. Resulta lucrativo legalizar un partido político. Esto es parte de la corrupción política.
Aun así la prensa señala que la fusión y la transformación en partido Frente Amplio congregará a 60.000 militantes conviviendo a este nuevo partido en el partido más grande (????) y que aumentaría a 70.000 en el caso que se unan a ese proceso de fusión el partido Comunes también investigado por graves casos de corrupción y Plataforma Socialista. Ya sabemos que esos futuros 70.000 son inexistentes.
Sin embargo, lo que no dice la prensa oficialista es que esta fusión se da en medio de la mayor crisis que ha vivido el nuevo progresismo o socialdemocracia de reemplazo. Si Gabriel Boric llegó al gobierno prometiendo cambios estructurales que terminen con el neoliberalismo estos no se han producido y por el contrario Boric tempranamente abandonó sus críticas contra la Concertación y la derecha fascista para luego reivindicar y hacer suyo lo obrado por la Concertación y avanzar hacia la conciliación y maquillaje de la derecha fascista como por ejemplo elevando a Sebastián Piñera de demócrata y de servidor público que no posee.
Lo anterior llevó, por parte de Boric, al perfeccionamiento de los más de 30 años de neoliberalismo, de injusticias y explotación que llevo a las multitudinarias protestas del estallido social lo cual ha llevado al envío de más de 48 leyes represivas, el impulso de una nueva ley antiterrorista y de inteligencia, la manutención del Estado de Excepción y de la militarización del Wallmapu provocando todo una baja considerable en su apoyo promediando el 28%.
Este proceso de fusión se da en medio de investigaciones judiciales contra Revolución Democrática y el partido Comunes por graves casos de corrupción y de uso de recursos del Estado destinados a programas sociales para fines partidarios, es decir, por robo de recursos. También ese proceso de fusión urgente se da a meses de las próximas elecciones nacionales de alcaldes, concejales y gobernadores donde de no crear una nueva marca de fantasía el progresismo se podría ver envuelto en una debacle electoral donde la derecha fascista podría resultar vencedora y a miras de las próximas elecciones presidenciales del próximo año puede asegurar un desastre. Este posible desastre electoral y la fusión de ambos partidos tiene como urgencia y fundamento, también, el bajo apoyo de Gabriel Boric que bordea el 28%. Requieren entonces renovar, cambiar los payasos del circo para continuar vendiendo entradas para el espectáculo.
Plebiscito de fusión
Corrupciones frenteamplistas